Reseña Libro: Las Lágrimas de Eros


Las Lágrimas de Eros
Por: Diego Villa Caballero


“La violencia del placer espasmódico se halla en el fondo de mi corazón.
Al mismo tiempo, esta violencia -me estremezco
al decirlo- es el corazón de la muerte: se abre en mí!
La ambigüedad de esta vida humana se refleja tanto en un
ataque de risa como prorrumpiendo en sollozos. Existe la dificultad
de conciliar el cálculo razonable, que la fundamenta, con
esas lágrimas...con esa horrible risa”.
Georges Bataille – Las Lágrimas de Eros.


Título: Las Lagrimas de Eros. Original: (Les Larmes d’ Éros)
Autor: Georges Bataille
Género: Ensayo - Arte
Idioma: Español (Originalmente francés)
Traducción: David Fernández
Año: 1981 (Primera edición), febrero de 2010 (quinta edición) 
Editorial: Tusquets Editores
País: España
Páginas: 256


Georges Bataille nació en Billom, Francia en 1897. Fue literato, pensador, novelista y crítico pero bibliotecario de profesión, fundó el Colegio de Sociología y también estuvo a cargo de varias revistas. Sus principales influencias y puntos de referencia los encontramos en Hegel, Heidegger y por su puesto en Nietzsche. Sus áreas de trabajo estuvieron centradas en el estudio del erotismo, el misticismo, el surrealismo y como los anteriores se relacionan con la antropología, la literatura, la poesía, la filosofía y la historia del arte. Autor de numerosos escritos, en habla hispana su trabajo mejor conocido es el ensayo El Erotismo (L’erotisme) de 1957 en el cual desarrolla una sugestiva tesis que plantea lo siguiente: la culminación y satisfacción de nuestros apetitos carnales, así como de aquellos requerimientos más sublimes de nuestra espiritualidad son procesos idénticos. En otras palabras expresa la idea de que el éxtasis religioso y el erótico son experiencias análogas.
 
En 1959 comenzó a escribir las Lágrimas de Eros (el texto que nos compete en esta entrada) y lo terminó en 1961, fue su trabajo final. El ensayo lo dejó muy complacido,  Bataille murió en 1962 (Orleans) y nunca llego a saber que este último material sería vetado arbitrariamente por André Malraux desde su puesto como ministro de cultura del gobierno francés. Sin embargo lo anterior resulta comprensible hasta cierto punto, ya que en ocasiones anteriores varios de sus trabajos fueron calificados de transgresores, hirientes e incluso de crudamente pornográficos y aún resultaban intolerables para la sensibilidad de algunos sectores de la burguesía y del establecimiento religioso de la época. Georges Bataille no fue suficientemente valorado durante su vida por el mundo académico e incluso hoy su reconocimiento es bastante modesto si lo comparamos con la fama e interés que han ganado pensadores de inferior calibre como Michel Foucault (a quien Bataille influenció notoriamente), por lo que pretendo sacarlo del olvido y rendir un humilde pero merecido homenaje a través de uno de sus libros clave.

 

Las Lágrimas de Eros es uno de los puntos de mayor esplendor para las inquietudes de Bataille respecto a la conexión entre lo sagrado, lo erótico y la violencia. Tomando figuras históricas como Gilles de Rais, La Condesa Elizabeth Bathory, el Marqués de Sade, Gustave Moreau, André Bretón, así como los protagonistas de prácticas insólitas y turbulentas como la religión Vudú y las victimas de un tipo especifico de tortura china (la de los cien pedazos). El autor revela aquello que es común en todos los personajes y elementos anteriormente mencionados: la muerte como una obsesión. Este ensayo además está ilustrado con obras de arte, principalmente occidental, de las épocas más representativas y fue desarrollado a partir de las ideas exploradas en los ensayos previos El Erotismo: Muerte y Sensualidad y Lascaux o el Nacimiento del Arte.  

En el libro el autor examina la idea de la muerte condensada en la imagen de “la pequeña muerte” también conocida como La petite mort, denominación para el instante que sigue inmediatamente al clímax sexual; por otro lado también aborda la cercanía de la muerte en las prácticas sadomasoquistas y la muerte como parte fundamental de los rituales religiosos y el concepto de sacrificio;  con esta obra Bataille nos enseña o mejor aún nos recuerda que la experiencia amatoria nunca estará confinada exclusivamente a un terreno placido sino que también está atravesada por un campo de letales espinas donde la zozobra y la muerte son la ley. En esencia el dominio del Eros (Deseo) también es compartido con Thanatos (Muerte), dos reyes que gobiernan juntos nuestros cuerpos y mentes, esta aparente contradicción nos genera angustia y terror pero también fascinación; otra idea relevante aquí es aquella relacionada con la hipótesis de que el nacimiento y el desarrollo del erotismo están ligados al momento en cual el ser humano primitivo fue consciente de su propia mortalidad.  

Adicionalmente tenemos la visión del arte, desde el inicio nuestros días la expresión artística ha sido el espejo en el que una y otra vez el complejo juego de ambivalencias Eros-Thanatos toma forma.  En este libro GB nos lleva en un recorrido desde las Venus paleolíticas, la brutalidad de los cultos sangrientos y extáticos del cruel dios Dionisos, pasando por la morbidez del arte medieval, la exuberancia del Renacimiento y el manierismo hasta algunos de los estilos artísticos de temática fantástica y onírica que sobresalieron en el siglo XX. 



Adicionalmente el libro posee un texto introductorio de J.M. Lo Luca, amigo y colaborador de GB en este libro en relación a la selección de las obras de arte, encontramos también cartas entre Lo Luca y Bataille en las que discuten diversos temas relacionados a la creación del libro entre otros y finalmente un prefacio del propio autor del cual comparto una parte del texto. Las Lagrimas de Eros es un viaje a través de uno de los aspectos más importantes de la historia del arte pero sobre todo es un viaje a través del erotismo en sus más crudas, contradictorias y oscuras expresiones, un recorrido que está plagado de escenas de cuerpos de deidades y humanos en el cenit de su belleza pero también de cadáveres, tortura, bestialismo, canibalismo, fetichismo, onirismo, libertinaje, suicidio y exaltación ritualista que logran sacudir y exceder los límites impuestos por la consciencia del lector pasivo para convertirlo en un espectador activo. 

 
Las Lágrimas de Eros – Prefacio de GB:
“Finalmente estamos comenzando a ver el absurdo de realizar alguna conexión entre el erotismo y la moralidad. Sabemos que esta se originó en la conexión entre el erotismo y las más distantes supersticiones de la religión. Pero más allá de la exactitud histórica, nunca debemos perder la vista de este principio: o bien estamos obsesionados principalmente por lo que deseamos, por lo que la pasión más ardiente nos sugiere: o deseamos con razón un futuro mejor. 
Hay al parecer un camino intermedio. Puedo vivir con la esperanza de un futuro mejor, pero aun así puedo proyectar este futuro en otro mundo. Un mundo en el que solo puedo ser introducido por la muerte.
Este camino intermedio era, sin duda, inevitable. Llegó un tiempo para el hombre en el que éste debería tener en cuenta -mucho más que cualquier otra cosa- las recompensas o los castigos que podrían sobrevenir después de la muerte...

Pero, al final, vislumbramos el momento en el que tales temores (o esperanzas) dejan de intervenir, y el interés inmediato se opondrá, sin término medio, al interés futuro. El deseo ardiente se opondrá, sin más, al cálculo reflexivo de la razón.

Nadie imagina un mundo en el que la ardiente pasión dejara de perturbarnos definitivamente. Por otra parte, nadie considera la posibilidad de una vida desligada por siempre de la razón”.


© Copyright texto de la reseña 1 de diciembre 2018 Diego Villa Caballero, Desde las Hespérides Blog.

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