Sobre el autor.
Saludos estimados lectores.
En esta primera entrada de
blog lo más natural, lógico y educado que me ha parecido es escribir un texto presentándome. No siempre es fácil hablar de uno mismo y a mí en
particular me cuesta mucho trabajo, en parte porque con el pasar de los años
los velos con los que se viste la memoria son cada vez más difusos e
impenetrables pero haré lo posible por ser veraz como breve; en esta pequeña
presentación tratare de contarles algunas de mis experiencias de vida e inclinaciones
intelectuales y estéticas.
Mi nombre es Diego Villa
Caballero. Nací el 14 de abril del año 1983, bajo el signo de Aries (la astrología aunque no es una ciencia es una de mis aficiones), en el
seno de una familia de clase media y bastante aficionada a los libros. Desde
que puedo recordar en mi casa siempre hubo libros, clasificados por tema en una
biblioteca mediana y modesta en cantidad pero sobresaliente en calidad, la cual estaba
poblada por numerosos volúmenes de las enciclopedias PLANETA, SALVAT y la
valiosa y completísima LEXIS 22, también por lo más relevante de la literatura latinoamericana, unos pocos clásicos de literatura rusa e historia
universal publicados por el Círculo de
Lectores. El escritor español Fernando
Sánchez Dragó dice que "los libros que marcan nuestra existencia son aquellos
que se leen en la infancia y en la adolescencia", tiene mucha razón por lo
tanto en esta entrada quisiera contarles acerca de los libros que leí en la
primera etapa de mi vida.
No recuerdo exactamente el
momento en el que tomé un libro por primera vez, pero recuerdo haber tenido
muchas veces en mis manos las enciclopedias de la casa, mi padre en algún momento entre los años 1988 y 89
observó mi afición por la lectura, así que me regaló
tres libros que aún conservo con sus dedicatorias y fechas: Cuentos por teléfono de Gianni Rodari
conformado por unos preciosos relatos de aventuras infantiles ambientados en
diversos lugares de Italia y Europa los cuales se caracterizan por un lenguaje
ingenioso, imaginativo, fresco y sencillo apto para iniciar a cualquier niño en
el hábito de la lectura. El segundo
libro que recibí fue la antología poética llamada Versos memorables. Las 100 más famosas
poesías colombianas, libro que contiene algunos de los poemas mejor logrados de poetas y figuras relevantes de la literatura colombiana
como José Asunción Silva, Rafael Pombo, León de Greiff, Julio Flórez, Porfirio
Barba Jacob, Guillermo Valencia entre otros. A este libro dedicare una entrada
más adelante en la cual analizaré y les mostraré algo su contenido. Y el
tercero fue una edición ilustrada de los Cuentos
de los hermanos Grimm recopilados y adaptados por Roberto de Ausona.
Otros libros que con el tiempo se sumaron
a mis libros infantiles fueron una edición de los famosos Cuentos de Andersen y Alicia en el país de
las maravillas de Lewis Carroll. Un par de años después
recuerdo haber leído dos libros que marcaron mis intereses para siempre. Por todos los dioses de
Ramón García Domínguez, con este
libro comenzó uno de los más grandes amores de mi vida, la cultura y mitología griega. El
segundo fue Azul de Rubén Darío,
aquel carnaval poético de imágenes fantásticas y atmósferas lujosas que
transitan por toda la obra lograron dejar en mi mente infantil una huella
profunda.
Sin recordar un orden ni fechas especificas, en mi
fragmentada memoria tengo recuerdos de
haber leído en mi adolescencia y hasta los 18 años al menos un libro de Poe, Borges, Nietzsche, Albert Camus, Maupassant, Balzac, James Joyce, Virginia Woolf, Robert Graves, Jalil
Gibran, las hermanas Brontë, Mario Benedetti, fragmentos de Cervantes, Shakespeare y
Homero, los cuentos completos y El retrato de Dorian Gray de Oscar Wilde y el libro Entrevista con la historia de Oriana Fallaci; material que en su
momento por obvias razones no entendí muy bien pero que ayudó a despertar otra
de mis pasiones que es el estudio de la historia. Además a esto puedo añadir la lectura de
comics que conseguía en los kioskos del centro de Bogotá cuando estos aun
existían en los años noventa.
Respecto a mi formación académica diré que después de terminar
el bachillerato (secundario) estudié Derecho por un año pero no logré desarrollar
un gusto o al menos las habilidades que me permitieran navegar en el ambiente
legal, así que cambié de carrera y estudié lenguas y literatura en la
Universidad de los Andes y años después de graduarme realicé algunos cursos; específicamente en cultura
clásica y de lengua latina y griega, en Buenos Aires, Argentina. Actualmente me
desempeño como profesor de inglés, lengua castellana y ocasionalmente como traductor y corrector
de estilo independiente, además estoy escribiendo mi primer libro de cuentos
cortos.
La idea de realizar este blog había rondado por mi
cabeza durante varios años pero hasta ahora no se habían reunido las tres
condiciones que considero indispensables para el desarrollo de este proyecto.
La primera es ánimo, ganas, impulso o voluntad, la segunda es el tiempo
disponible y la tercera es la claridad y madurez intelectual suficiente para
poder articular opiniones o pensamientos, así como para analizar diferentes obras y producir
contenido en relación a ellas. En lo posible tratare de publicar al menos una entrada
al mes sobre algún evento, opinión o reseña de algún libro
que haya leído. No siendo más me despido, no sin antes agradecer a quienes se
hayan tomado el tiempo de leer estas palabras.
© Copyright texto 11 de agosto 2018 Diego Villa Caballero, Desde las Hespérides Blog.
sigue escribiendo
ResponderEliminarCongratulaciones Diego! Me gusto la forma en que escribiste la presentación con la línea de tiempo basada en los libros que leyó. Un abrazo.
ResponderEliminarQuerido Diego, perdonarás este léxico poco o nada sofisticado, pero entenderás que luego de 4 horas intensas de bici y una sopa de ajiaco muy agradable, la cantidad de oxígeno que está llegando al cerebro está como escasa. De todas formas, no quería dejar pasar esta oportunidad de expresar lo que hay en mi corazón respecto a tu blog. Sencillamente, ME ENCANTA y me ha "sorprendido" gratamente. Conozco tu pasión por la literatura y el arte, así como el encantador don de la palabra y sentido del humor que te caracterizan. ¡Gratas congratulaciones! Excelente trabajo. ¡Muchos éxitos!
ResponderEliminar