Reseña Evento: La Capilla Sixtina en Bogotá
La Capilla Sixtina en Bogotá.
Texto y fotos: Diego Villa Caballero.
“Tras cuatro años de torturas, y más de 400
figuras de tamaño real, me sentía tan viejo y extenuado como Jeremías. Tenía 37
años y ni siquiera mis amigos ya reconocían al anciano en el que me había
convertido. “
Miguel Ángel sobre La Capilla Sixtina.
Ludwig Feuerbach
dijo con razón que “La religión no es la fuente del arte”, no obstante la
historia de las religiones y del arte nos permite asumir que el arte si es la fuente de la religión,
la humanidad ha creído en sus dioses porque el arte se los ha entregado en la
forma de supremas creaciones nacidas del matrimonio entre la imaginación y la
técnica, creando elementos portentosos que destacaban por encima de todas las
cosas de la naturaleza, que generaron tal asombro en la humanidad y despertaron en ella, desde
la antigüedad más remota, el anhelo de embarcarse en una búsqueda por lo
inefable y lo trascendente. Uno de los mejores ejemplos de esta experiencia son los
frescos de la Capilla Sixtina a cargo
de Miguel Ángel Buonarroti llamado
también el divino. Una empresa
monumental que reafirmaría la influencia de la iglesia en el ámbito terrenal
pero que al mismo tiempo colmaría las necesidades estéticas y espirituales de
millones de personas hasta nuestros días.
La historia.
El
30 de mayo de 1508 el maestro Miguel Ángel aceptó el trabajo de decorar la
bóveda de la Capilla Sixtina, obra que para muchos representa la cúspide en la
carrera del maestro, en un comienzo el artista se había trasladado a Roma con
la intención de comenzar a trabajar en el sepulcro del Papa Julio II, sin embargo este comenzó a considerar que el que se hiciera su monumento fúnebre en vida era algo de mal augurio
y ahora el trabajo para Miguel Ángel consistía en pintar la capilla con escenas
bíblicas. El artista no mostró mayor interés en esta propuesta y trató de
zafarse de ella ya que consideraba que la pintura no era su fuerte sino la
escultura pero la negativa no convenció al Papa, todo lo contrario, su ferrea insistencia
terminaría por hacer ceder al maestro.
En
un principio Miguel Ángel quiso tener la ayuda de algunos de sus compañeros y
amigos artistas, sin embargo al poco tiempo decidió apartarlos de la tarea al
considerar que los aportes que estos podían hacer servían poco a la visión que él tenía, así que decidió asumir la titánica tarea él solo.
Durante los cuatro años de la labor, él experimentó varias dificultades tanto en lo técnico como en su
vida personal, además de sufrir el acoso del impaciente Papa, aún así logró
llevar a cabo una de las mayores glorias del arte universal, existe un antes y
un después de la Capilla Sixtina; aquí Miguel Ángel decidió apartarse del
modelo de pintura florentino característico en Leonardo Da Vinci y Rafael de Urbino,
en su imaginación creo uno nuevo que no sería igualado por nadie jamás.
La
obra consta de nueve paneles centrales cada uno representa pasajes del
Antiguo Testamento agrupados en series de tres; la creación del universo, la
creación de Adán y Eva junto con su expulsión del paraíso y las historias de Noé, aunque no sigue una cronología específica. Al lado de cada
panel se encuentran retratados celebres profetas y profetisas o sibilas, los
primeros pertenecientes al mundo bíblico y las segundas a la tradición del
paganismo grecorromano, vestidos en túnicas de vivos colores y ejecutando
vigorosas posiciones. En las estructuras triangulares y las medias lunas
(lunetas) el maestro pintó historias y retratos imaginarios de personajes que
forman la genealogía de Cristo. Por otro lado tenemos un elemento que parecería
ser ajeno al tema de la obra y es el de los jóvenes atletas desnudos (ignudi)
que en parejas llenan los espacios de las esquinas de cada panel y sostienen
además medallones dorados que tienen en su interior diversas escenas bíblicas; son
hombres jóvenes y musculosos que se encuentran en la cima de su belleza y
esplendor físico, los cuales fueron colocados en posiciones que resaltan en cada
uno la combinación de gracia y fortaleza, se cree que con ellos el maestro
quería rendir un homenaje a la estatuaria clásica de la que fue devoto durante
su carrera. Por último pero no menos importante el divino Miguel Ángel realizó un fresco entre 1536 y 1541 para el altar de la
capilla, El Juicio Final, en él
tenemos la suprema visión del ascenso y descenso de las almas al cielo y al
infierno acompañadas con imágenes de santos renombrados y
personajes de la mitología griega como Caronte y el juez del inframundo Minos.
La exposición.
Por
primera vez en Bogotá tenemos la oportunidad de apreciar reproducciones de los
34 frescos principales de la Capilla Sixtina en tamaño real, en escala 1 a 1,
excepto el fresco de El Juicio Final
el cual tuvo que se adaptado a las dimensiones del lugar de exposición. El evento comenzó el 11 de abril e irá hasta
el 20 de mayo, las fechas están dentro del marco de la semana santa, el mejor ámbito para desplegar el arte religioso de la Capilla Sixtina ante el público
colombiano, el cual según los organizadores ha respondido de manera bastante favorable. Adicionalmente estas reproducciones cuentan con una ventaja respecto a los originales de la capilla, ya que las del evento pueden ser apreciadas por el espectador en un tamaño optimo y a una distancia corta mientras que las originales que se encuentran en la bóveda están bastante lejos del visitante y sus detalles no pueden llegar a ser apreciados con la misma calidad.
La
exposición cuenta con guías que relatan la historia de la capilla, los
principales detalles del proceso de creación de la obra, así como también llamativas
anécdotas sobre la turbulenta y apesadumbrada personalidad de Miguel Ángel y
los conflictos que tuvo con algunos de sus contemporáneos mientras realizaba
este trabajo, la forma en la que el artista se retrató como Jeremías identificándose
con el dolor espiritual del profeta y un somero análisis sobre el contexto
político y religioso de la época (la contrarreforma). En general la información
dada por la guía fue suficiente y correcta aunque se echo de menos la
profundidad y precisión en la información respecto a la historia universal y ciertos pasajes bíblicos; con todo la exhibición de los frescos es
altamente recomendable para personas de todas las edades y
puede considerarse como el capítulo siguiente al evento del Museo del Prado que tuvo lugar el año
pasado en Bogotá.
Se
debe mencionar también que el evento es fruto exclusivo del esfuerzo del sector privado, lo cual es algo digno de celebración; es positivo que los empresarios financien proyectos culturales como una manera de contrarrestar la
errónea y peligrosa idea que pretende establecer al estado como el único agente
promotor y difusor de las artes y la cultura en el país, generando un monopolio
perverso que envenena a la creación artística, a los artistas e intelectuales con las practicas mas cuestionables de la política, sin mencionar el riesgo
de expansión de la clase burocrática que mayoritariamente es parasitaria y corrupta. En un panorama ideal
tanto el sector privado como el público deben tener igualdad de facilidades y
recursos para acrecentar y dinamizar la vida cultural del país.
La obra
en la Capilla Sixtina sirvió a Miguel Ángel para presentar una cromatismo
revolucionario para su época, el conjunto de la bóveda y el altar es vibrante y
sobrecogedor, el ojo apenas soporta la colosal belleza y poderío que se le
presenta y no es de extrañar que hayan testimonios de algunos espectadores que se
deshacen en lagrimas al visitar la capilla en Italia. El observarla
posiblemente genera sensaciones similares a las que deben sentir aquellos que
han viajado al espacio exterior y han podido contemplar la inmensidad del
océano cósmico plagado de estrellas, astros danzando y oleadas de nebulosas
multicolores. En otras palabras equivale a contemplar en un espacio reducido la
profundidad de la existencia en toda su magnificencia.
* La exhibición se encuentra en la Calle 104 # 17-22 Iglesia del Teatro ABC, Bogotá.
Bibliografía recomendada.
* Grimm Hermann, Vida de Miguel Ángel, Editorial
Poseidón.
* Harris Nathaniel, La Vida y Obras de Miguel Ángel, El
Sello Editorial LTDA.
* Néret Gilles, Miguel Ángel, Taschen.
* Symonds John Addington, The Life
of Michelangelo Buonarroti, Charles Scribner’s.
© Copyright 20 de abril 2019 Diego Villa Caballero, Desde las Hespérides Blog.
© Copyright 20 de abril 2019 Diego Villa Caballero, Desde las Hespérides Blog.
Comentarios
Publicar un comentario